Los 5 principales beneficios del cannabis para la Esclerosis Múltiple (EM)

Artículo de SensiSeeds - Revisión Médica por Sanjai Sinha, MD


 

Los tratamientos con cannabis medicinal han demostrado una gran eficacia en el control de muchos de los síntomas de la esclerosis múltiple (EM). En este artículo, vamos a echar un vistazo a los síntomas concretos que se ven afectados de forma positiva por el consumo de cannabis o por las terapias a base de cannabis.

La esclerosis múltiple (EM) es una enfermedad mediada por la disfunción del sistema inmune, por medio del que una respuesta inmune anormal se dirige al sistema nervioso central  . Es una enfermedad crónica que afecta a la médula espinal, al cerebro y al nervio óptico. Según la American National MS Society, se estima que hay más de 2 millones de personas afectadas en todo el mundo. El tratamiento con cannabis se considera una posibilidad para los pacientes con EM porque es antiinflamatorio, analgésico y antiespasmódico.

1.   El cannabis es antiinflamatorio

La característica principal de la esclerosis múltiple es la inflamación del tejido neuronal. La EM es una enfermedad autoinmune en la que las células inmunitarias del propio cuerpo atacan al sistema nervioso central, lo que produce la inflamación de las vainas de mielan que rodean las neuronas (nervios) en el cerebro y en la columna vertebral. En último término, esta inflamación conduce a que las vainas de mielina se vean dañadas de forma irremediable, lo que a su vez provoca una serie de síntomas neurológicos, entre los que se incluye la pérdida del control motor, la debilidad muscular y los espasmos, el estado de ánimo inestable y la fatiga.

Se sabe que el cannabis reduce la inflamación, y los médicos y herboristas de todo el mundo llevan siglos utilizándolo como antiinflamatorio. Durante los últimos años, se ha investigado a fondo la capacidad del cannabis para reducir la inflamación relacionada con la EM, lo que ha servido para la producción del primer mundo del mundo derivado del cannabis y aprobado para su comercialización, Sativex, fabricado por la empresa británica GW Pharmaceuticals.

La investigación ha demostrado que los agonistas del receptor CB1 (como el THC o la anandamida agonista parcial endógeno) ejercen un efecto neuroprotector en los individuos que sufren EM mediante la reducción de la respuesta inmune y, por lo tanto, reducen la inflamación. En un estudio importante, ratones criados para tener deficiencias en los receptores CB1 presenta una mayor susceptibilidad a la inflamación y a la neurodegeneración cuando se les infectó con un modelo animal de EM, conocido como encefalomielitis alérgica experimental.

2.   El cannabis tiene propiedades analgésicas

El dolor es uno de los síntomas más frecuente y debilitante de la EM y lo sufren un 50-70% de los enfermos. El dolor relacionado con la EM se produce o bien como resultado directo de la inflamación del tejido neural, o como resultado de los espasmos musculares y la espasticidad que ejercen presión sobre el sistema musculo esquelético.

Se ha demostrado que el cannabis puede controlar el dolor asociado a la EM. En un ensayo clínico realizado en seres humanos en 2005, se administró un fármaco a base de cannabis en forma de spray sublingual con una proporción de 1:1 de THC:CBD. El ensayo demostró que el medicamento a base de cannabis era significativamente más eficaz que el placebo en la reducción del dolor y de los trastornos del sueño en pacientes con EM.

Asimismo, el cannabis fumado también ha demostrado su eficiencia para reducir el dolor relacionado con la EM en varios estudios, entre los que se incluye un estudio en el que participaron 112 pacientes de EM de los EE. UU. y del R.U., en el que la inmensa mayoría informó de una disminución del dolor al fumar cannabis. 

El cannabis reduce el dolor en pacientes con EM, trabajando directamente en la reducción de la respuesta inmune y de la inflamación resultante, y también disminuye el dolor musculo esquelético causado por los espasmos musculares y la espasticidad. En un análisis científico publicado en 2007, se afirmaba que un spray bucal que contenía tanto THC como CBD
era más efectivo para controlar el dolor relacionado con la EM que solo CBD o solo dronabinol (una forma sintética de THC).

3.   El THC y el CBD son antiespasmódicos

Otra de las características frecuentes de la EM son los espasmos musculares, es decir, las contracciones repentinas e involuntarias de un músculo o grupo muscular. Entre el 60 y el 90% de los pacientes informan de espasticidad.  Los espasmos pueden causar una sensación de dolor agudo y temporal, que por lo general desaparece después de un breve periodo de tiempo. La espasticidad muscular es un aumento anormal del tono o rigidez muscular. Puede afectar al caminar, al equilibrio y a veces al habla. La espasticidad muscular la produce el daño a las vías nerviosas que controlan el movimiento.

Se ha demostrado que el cannabis reduce la frecuencia de los espasmos musculares y la gravedad de la espasticidad muscular. En 2005, un estudio aleatorio de doble ciego, controlado con placebo y cruzado (considerado la prueba de referencia para los ensayos clínicos) descubrió que 37 de los 50 pacientes incluidos en el estudio presentaban una mejoría en la movilidad y en la frecuencia de los espasmos musculares. En un ensayo controlado aleatorio realizado en 2007, se demostró que los preparados a base de cannabis que contienen THC y CBD eran más eficaces que el placebo para tratar la espasticidad muscular, aunque este estudio en particular no tuvo mucha relevancia a nivel estadístico.

Es probable que el efecto del cannabis sobre la espasticidad y los espasmos musculares se deba a su capacidad para reducir la inflamación de las neuronas y retrasar la progresión general de la enfermedad. En un estudio publicado en la revista Nature en el año 2000, se demostró que los agonistas de los receptores cannabinoides, incluidos el THC y R(+)-WIN 55,212 (un agonista sintético), mejoraban los síntomas de la espasticidad y de los temblores, mientras que los antagonistas de los receptores cannabinoides (en concreto el receptor CB1) agravaban los síntomas.   

4.   El cannabis es antidepresivo

La depresión clínica es una característica común de la esclerosis múltiple, y la sufren hasta el 50% de los pacientes en EM durante el curso de la enfermedad. La depresión en la EM puede producirse debido a daños en los nervios que ayudan a regular el estado de ánimo, o puede ser un efecto secundario de otros medicamentos utilizados para controlar la progresión de la enfermedad. Además de provocar depresión grave, la EM también puede ocasionar una serie de síntomas relacionados con la disfunción emocional.

La capacidad del cannabis para tratar la depresión es un tema de debate, y disponemos de pruebas sustanciales aportadas por ambas partes. Varios estudios han indicado que el THC, el CBD, y el cannabicromeno (CBC) pueden ejercer un efecto de tipo antidepresivo. Se sabe que el sistema endocannabinoide desempeña un papel importante en la regulación del estado de ánimo y de los niveles subjetivos de felicidad, y los endocannabinoides como la anandamida son fundamentales para el proceso. Se cree que determinadas variaciones genéticas en la expresión de los receptores CB1 hacen que algunos individuos sean más sensibles a los efectos de mejora del estado de ánimo del cannabis.

Más del 90 % de los 112 pacientes con esclerosis múltiple de los EE. UU. y del R.U. que participaron en el estudio anteriormente citado, informaron de que el consumo de cannabis mejoraba los síntomas de la depresión. La relación implicada es compleja, y la mejora subjetiva del estado de ánimo puede deberse a una mejoría de otros síntomas que pueden causar angustia emocional, incluidos el dolor y la espasticidad, además de afectar directamente a las neuronas que participan en la regulación del estado de ánimo.

5.   El cannabis puede aliviar las molestias abdominales

La EM puede producir una serie de problemas gastrointestinales como dolor abdominal, estreñimiento (sufridos por cerca del 50 % de los pacientes) e incontinencia fecal (padecida por el 30-50 % de los pacientes). Estos síntomas pueden resultar embarazosos, dolorosos y causar ansiedad.

Entre el 51-60 % de los pacientes participantes en el estudio describieron que la necesidad urgente de defecar disminuía con el consumo cannabis, el 44 % comunicó que la incontinencia fecal se reducía, y el 30 % que el estreñimiento mejoraba. Desde hace tiempo, se ha relacionado el cannabis con la disfunción gastrointestinal, incluido el síndrome del intestino irritable (SII) y la enfermedad de Crohn; se cree que se debe al efecto de los cannabinoides en los receptores (específicamente en los receptores CB2) del sistema nervioso periférico que controla la función intestinal.

Aunque el cannabis pueda no tener importancia médica en lo que respecta a curar la EM o atacar su causa directa, sus efectos pueden ser sumamente beneficiosos para controlar los síntomas. Incluso la depresión sufrida por los pacientes con EM puede ser un efecto secundario de otros síntomas, y al reducir esos otros síntomas, el cannabis puede mejorar la calidad de vida de los pacientes que padecen EM.