Los resultados de uno de los primeros estudios clínicos sólidos sobre el uso de cannabis medicinal en el tratamiento del síndrome de Tourette han sido publicados, revelando avances prometedores. El síndrome de Tourette se caracteriza por tics motores y vocales involuntarios, los cuales pueden tener un impacto significativo en la calidad de vida de las personas diagnosticadas con este síndrome.

Aunque existen tratamientos para el Tourette, como terapias conductuales y medicamentos psiquiátricos, la investigación, cofinanciada por la Universidad de Sydney y el Instituto de Investigación Wesley, ha sugerido que el cannabis medicinal puede ser una alternativa efectiva. El estudio clínico, llevado a cabo en Australia, trató 22 pacientes con aceite de cannabis medicinal. Estos mostraron una reducción estadística y clínicamente significativa de los tics en tan solo seis semanas.

¿Cómo fue el estudio?

Las 22 personas que participaron del estudio recibieron aceite de cannabis y un placebo durante dos bloques de seis semanas. La dosis medicinal era una formulación equilibrada de CBD y THC, y el máximo suministrado fue de 20 miligramos.

Los investigadores observaron una reducción significativa de los tics, así como mejoras en los síntomas obsesivo-compulsivos y la ansiedad. Por lo que, concluyeron, según informó Cannabis Health News, que “este estudio se suma a una pequeña cantidad de literatura que sugiere que el THC:CBD oral 1:1 es un tratamiento eficaz para los tics y la comorbilidad psiquiátrica asociada con el síndrome de Tourette grave”.

Sin embargo, aunque los efectos adversos fueron leves, es importante darle la entidad que se necesita, para identificar los efectos a largo plazo y poder desarrollar la tolerancia al efecto anti-tic. Dicho por los científicos en este estudio y por otros en anteriores relacionados con este, se requieren mayores investigaciones para determinar la eficacia del cannabis medicinal en el alivio de los síntomas y la mejora de la calidad de vida de los pacientes con síndrome de Tourette.

Estudios previos sobre cannabis y Tourette

Esta no es la primera investigación sobre marihuana y Tourette.

En diciembre de 2022 se realizó un estudio israelí titulado Uso de Cannabis Medicinal en Pacientes con Síndrome de Gilles de la Tourette en un Entorno Real, donde se analizaron los síntomas de los pacientes inmediatamente antes y después de seis meses de tratamiento con cannabis. Los participantes del estudio en general inhalaron flores de cannabis principalmente con THC, aunque algunos pacientes también usaron fórmulas de extractos.

Sus investigadores destacaron que “se encontró una mejora estadísticamente significativa en la calidad de vida, la situación laboral y reducción en el número de medicamentos. Un número estadísticamente significativo de pacientes informó sobre mejoras en los síntomas de trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) y ansiedaddespués de seis meses de tratamiento”. Más concretamente, el 67% y el 89% de los pacientes con trastorno obsesivo-compulsivo y comorbilidades de ansiedad, respectivamente, informaron una mejoría.

Antes de esto, otro estudio, publicado en el 2020, midió los niveles de importantes cannabinoides en el líquido cefalorraquídeo en pacientes con Tourette. Éste es un fluido biológico que está en estrecha relación con el sistema nervioso central (SNC) y su entorno. En la investigación, se comparó a pacientes adultos con síndrome de Tourette con un grupo de control sin tal diagnóstico.

Los investigadores descubrieron que existe una relación entre los compuestos anandamida (AEA), anaquidonoglicerol (2-AG), una molécula similar a los endocannabinoides, la palmitoil etanolamida (PEA) y el lípido ácido araquidónico (AA), con algunos sistemas de neurotransmisores. Esto deja claro que existe una relación primaria entre el control del sistema endocannabinoide y el síndrome de Tourette. Así, dicha asociación ha demostrado que, dependiendo de los niveles de estos compuestos, los pacientes con esta condición pueden controlar los tics y los espasmos involuntarios.

Vale la pena también mencionar una de las primeras investigaciones sobre marihuana y Tourette, realizado en el año 2003 y publicado por la revista Neuropsychopharmacology.Dicha investigación reveló que el THC, administrado durante un periodo de seis semanas y con una dosis de 10 mg, ayudó a 24 pacientes con Síndrome de Tourette.

Durante este período, los pacientes demostraron una evolución de la capacidad verbal y cognitiva. Tras seis semanas de tratamiento, con la retirada del THC, no se observó ninguna disminución de la memoria visual, la atención o el aprendizaje en los pacientes que participaron en el estudio. Los investigadores también identificaron una evolución en los déficits cognitivos agudos causados por la enfermedad.