Investigadores han descubierto que el cannabis medicinal podría ser un tratamiento prometedor para los adultos que viven con trastorno de espectro autista, según un estudio publicado en Therapeutic Advances in Psychopharmacology. El estudio investigó los efectos del cannabis medicinal en 74 participantes con el trastorno de espectro autista (TEA), con una edad media de 33 años. Así, halló mejoras en su calidad de vida relacionada con la salud, la ansiedad, la depresión y el sueño tras intervalos de uno, tres y seis meses.

Las conclusiones del estudio indican que el uso de cannabis puede mejorar la calidad de vida sin necesidad de modificar los rasgos básicos del autismo. Simon Erridge, jefe de investigación y de acceso de Sapphire Medical Clinics, que dirigió el estudio, subrayó que se necesitan más investigaciones para comprender plenamente los posibles beneficios del cannabis medicinal para los adultos con trastorno de espectro autista (TEA).

El cannabis medicinal fue bien tolerado por más del 80% de los participantes. Asimismo, los investigadores señalaron que el cannabis medicinal podría paliar las limitaciones de los medicamentos que se recetan actualmente a las personas con autismo, como las benzodiacepinas y los antipsicóticos, que tienen su propia gama de efectos secundarios.

Investigaciones anteriores también han explorado el impacto del cannabis medicinal en niños, adolescentes y adultos con autismo. Dos estudios, uno de 2018 y otro de 2019, registraron mejoras en su calidad de vida, especialmente en términos de depresión, inquietud e ira.

Si bien se necesita más investigación, el estudio reciente ofrece esperanza para quienes buscan apoyo y tratamiento para navegar por un mundo neurotípico que no siempre comprende o se adapta a sus necesidades únicas.

Los retos de vivir con un TEA pueden ser especialmente difíciles para algunxs adultos. Las interacciones sociales pueden resultarles difíciles y pueden tener obsesiones por las rutinas y sensibilidad a la luz o el sonido. Estos síntomas, que suelen asociarse a los niños, pueden continuar en la edad adulta y dificultar la vida independiente. Para las personas con trastorno de espectro autista, el cannabis podría cambiar las reglas del juego.

Aunque el cannabis sigue luchando con el estigma, hay una serie de empresas emergentes que no han perdido la esperanza y continúan tratando de aumentar la transparencia y el acceso al CBD y a los productos a base de cannabis, mientras construyen la infraestructura para que otros puedan expandirse utilizando su plataforma.

No es ningún secreto que el cannabis ha experimentado una falta general de tracción en los mercados. Las cuestiones normativas complicadas, sumado a la dura competencia, a menudo significan tiempos difíciles para las empresas.